Implementar un sistema integral que conecte la producción carcelaria con polos industriales externos y un mercado inclusivo, enmarcado en tres etapas principales: 1-Producción en Centros Penitenciarios: --Aprovechar las capacidades de reclusos en áreas como herrería, carpintería o textiles, enfocándose en generar componentes o productos útiles dentro de cadenas productivas más amplias. Garantizar estándares de calidad para facilitar la integración en mercados externos. Ejemplo: Fabricación de insumos como detergentes para uso interno o comercialización externa bajo protocolos regulados. 2-Expansión hacia Polos Industriales y Talleres Comunitarios: Crear unidades productivas externas que reciban a personas egresadas, asegurando la continuidad laboral. Ofrecer espacios para el desarrollo de emprendimientos sociales y talleres especializados. Complementar estas actividades con acompañamiento personalizado en hogares o comunidades vulnerables para casos específicos. 3-Estrategias de Comercialización y Sello Social: Implementar un "sello social" que respalde los productos y servicios como una forma de reinserción y desarrollo social. Establecer mercados rotativos, tiendas físicas y campañas en grandes cadenas comerciales para posicionar y promover estos productos. Enfocar esfuerzos en concienciar a la sociedad sobre el impacto positivo de su compra, incentivando el apoyo a estos proyectos. Impacto Esperado: Este sistema integral permitiría: Un uso eficiente de las capacidades productivas en cárceles y su continuidad al egresar. La inserción de personas liberadas en circuitos laborales formales, mejorando su autonomía económica. La creación de una marca colectiva que conecte con consumidores conscientes, apoyando la sostenibilidad del modelo.